La ecología es política
Marina de la Sierra
En el Corredor Seco, conocido por sus sequías en Honduras, Guatemala y el Salvador, la inserguridad alimenticia ha ido en aumento, coincidiendo con el aumento en el número migrantes de estos países hacia Estados Unidos. En Puerto Rico, el Huracán María dejó a la isla críticamente expuesta a la vulnerabilidad alimentaria por las interrupciones en la infraestructura de transporte y distribución, mostrando el peligro de la alta dependencia a la importación de comida. África posee más del 60% de la tierra cultivable del mundo, pero depende en gran medida de las cadenas de valor alimentarias mundiales ya que exporta sus recursos naturales e importa sus alimentos, lo que agrava la inseguridad alimentaria, el conflicto, la vulnerabilidad ante el cambio climático y empuja hacia la migración. El cambio climático tiene, sin duda, una influencia desestabilizadora en la producción de alimentos y como consecuencia, la migración.
A pesar de que la gran mayoría de los pobres y los que padecen inseguridad alimentaria del mundo viven en zonas rurales, la agricultura y el desarrollo rural han quedado al margen de los debates sobre migración. La necesidad de transformar los sistemas alimentarios se vuelve más clara conforme los efectos del cambio climático se vuelven más latentes. Sin embargo, esta transformación no solamente implica el uso sostenible de los recursos sino también la transformación de las estructuras socioeconómicas que dan forma a los sistemas agroalimentarios– el actual sistema global de producción y distribución de alimentos genera más que suficiente para alimentar a todo el mundo, pero deja a 815 millones de personas hambrientas. Mientras se intensifica la inestabilidad climática, la necesidad de reestructurar el régimen de alimentos nos deja las siguientes preguntas: ¿quién va a decidir que tipo de agricultura sustentable se que es necesario llevar a cabo, qué recursos naturales se usarán y quién será el actor social que la lleve a cabo? ¿La visión de intensificacion agrícola sustentable mitigará los impactos actuales de la industria o esta, a pesar de ser sustentable, permanecerá plagada por la desigualdad e injusticia? Una verdadera transformación ecológica de la agroindustria que verdaderamente aumente la resiliencia ante el cambio climático debe apuntar, no solamente a la sustentabilidad, sino también a la redistribución, diversidad y soberanía alimentaria. La justicia social y la justicia ambiental no deben separarse.